El emprendedor gastronómico e histórico militante peronista se postula a concejal por la ciudad. Pasó el 1 de mayo cocinando para vecinos de Floresta y luego explicó sus ideas políticas ante un Marcos Urtubey que, a diferencia de la mayoría de la gente, se reconoció como «orgullosamente rico».
El candidato a concejal por Unidad Popular, Fidel Puggioni, vivió un 1 de mayo agitado. Empezó el Día del Trabajador cocinando una olla popular a leña en Floresta. Allí, Puggioni llevó su actividad diaria, la gastronomía, para los vecinos de uno de los barrios históricamente postergados de la ciudad de Salta. Por la tarde asistió al programa Vermut con papas fritas, en Canal 10, donde se cruzó con un engreído Marcos Urtubey, el joven aspirante a la intendencia.
«Cuando uno escucha las palabras bonitas de algunos candidatos, piensa en cómo nos han engañado durante tanto tiempo», dijo Puggioni en el programa y señaló a Marcos Urtubey, a quien calificó como «parte de los que nos gobiernan hace tantos años».
«No tengo memoria que no nos haya gobernado la oligarquía. Nos gobiernan desde San Lorenzo, desde barrios privados. Gente que, como dijo él (señalando a Urtubey), empezó a trabajar en noviembre por la campaña. Empezó a recorrer barrios en noviembre. Es lamentable la situación de la gente que está viviendo en los barrios. Nosotros lamentablemente tuvimos que abrir un merendero hace un mes, donde ya les van robando tres veces la mercadería. Es en Vertedero, en San Javier. La situación de esa gente es tan lamentable. No tienen luz, no tienen agua, no tienen gas, no tienen cloaca, no tienen ningún tipo de seguridad. Vivir ahí es realmente vivir en medio de la nada, en medio de los dealers. Tuvimos que pedirles a los dealers que nos dejen pasar a cocinar al barrio. Esa realidad está a quince minutos del centro de la ciudad», detalló Puggioni.
Fidel aseguró que en esa zona «hay mucha gente buena que quiere hacer las cosas». Y «es el lugar donde el Estado no llega».
«No llega el Estado ni siquiera con la luz. Es donde fue el femicidio de Lorena hace muy poquito. Es donde no llega absolutamente nadie. Ese asentamiento tiene más de diez años. Hay 280 familias y el Estado dice que no pueden vivir ahí. Es como que los invisibiliza, el Estado municipal y el Estado provincial. Dicen ahí no pueden vivir, desaparezcan. No les dan ninguna opción», siguió.
Allí tomó la palabra Marcos Urtubey, que en una intervención al estilo Micky Vainilla, recordó que en el pasado mes de enero fue a un corralón, «compré una manguera y le llevé agua al asentamiento», asegurando que todo se puede con la «voluntad de hacer».
«Ese voluntarismo es el que no sirve», retrucó Puggioni. «Nosotros necesitamos que la gente se organice. No podemos seguir bancando estas situaciones donde ah sí, me sobra para una manguera, tomá. Hay que hacer que la gente se organice, hay que hacer que esa gente viva en condiciones dignas. Si seguimos así, seguimos gobernados por los Saravia, los Cornejo, los Patrón, los Urtubey, los Sáenz. Ponele el apellido que quieras. Siempre gobiernan para los mismos. Manejan la Justicia, manejan el Estado, tienen todos los cargos y viven del Estado. Así como les dicen a los trabajadores de la economía popular que son planeros, ustedes son planeros del Estado hace cuarenta años cuando empezó esto con Romero, después siguió con Urtubey, ahora sigue con Sáenz y la gente sigue igual en los barrios: hecha mierda».
Luego, Urtubey siguió respondiendo. Se jactó de ser «orgullosamente rico, gracias a dios» y trató de «zurdo» a Puggioni, quien se describió como peronista.
«Mi familia viene del peronismo. Mi abuela fue diputada del único gobernador desaparecido, Miguel Ragone. Mi abuelo fue funcionario, director de la cárcel. Mi viejo y mi vieja militaban en la CGT, son desaparecidos, fueron parte del Frente Revolucionario 17 de Octubre. Y nunca me afilié al PJ porque entiendo que en el PJ nunca estuvo el peronismo. Estuvo el justicialismo en algún momento, pero no el peronismo en sí», detalló.
«Creo que visité Misión La Paz, una misión wichí, hace 35 años, y siguen igual o peor -siguió Fidel-. Siguen muriendo los chicos por desnutrición. Niños y niñas. Se tapaban en el gobierno de Urtubey, se tapan en este gobierno nuevamente. No se muestran las estadísticas. Y lamentablemente la gran mayoría de la gente sigue en la misma situación. Por eso me involucro de esta manera. De lo más pequeño, de ser concejal, porque creo que es necesario igualar para arriba y no seguir en la situación en la que estamos».
Fuente Cuarto