A días de las elecciones provinciales, crece la tensión entre la docencia autoconvocada y el gobierno de Salta. Dada la falta de respuesta oficial al pliego de exigencias que entregó la Asamblea Provincial de Docentes Autoconvocados, se adoptaron diferentes medidas de protesta, entre ellas el paro por tiempo indeterminado.
Ayer por la tarde se iba a llevar a cabo una nueva asamblea provincial, pero fue desestimada y se optó por realizar un corte en el ex peaje Aunor, en el ingreso norte de la ciudad de Salta. La acción comenzó pasadas las 10 y la docencia contó con el acompañamiento de trabajadores de la salud, quienes también reclaman una recomposición salarial.
A medida que pasaban las horas y la respuesta oficial del gobierno provincial no llegaba, las y los maestros decidieron por la tarde abandonar la modalidad de cortes intermitentes de entre 15 y 30 minutos para pasar a un corte permanente total de la ruta. El endurecimiento de la medida provocó que pasadas las 21 llegaran efectivos de la Policía de Salta con la orden de desalojar a las personas que se manifestaban, en su mayoría docentes mujeres.
La decisión de desalojar la protesta provocó que por segundo día se vivieran momentos de tensión entre policías y la docencia. Ya el miércoles había habido forcejeos y empujones en la entrada a la Casa de Gobierno, en la zona oeste de la ciudad, después de una marcha multitudinaria desde el microcentro salteño.
No obstante, la situación en el ex peaje Aunor escaló a un nivel de mayor violencia por parte de la policía. Algunas maestras denunciaron que sus pares recibieron gas pimienta en los ojos provenientes de personas que estaban en el interior de vehículos que llegaron junto a los móviles policiales.
El docente y delegado por Capital, Claudio Uriona, aseguró a Salta/12 que las medidas adoptadas, como los cortes de rutas en las diferentes arterias de la provincia, se debieron a “la negativa del gobierno” porque “no abren el diálogo para un entendimiento, para una solución”. “Se decidió avanzar con estos cortes de rutas en Aunor, que eran intermitentes de 15 y 30 minutos, pero las bases han decidido realizar un corte permanente” que llegó a superar las tres horas de duración, narró Uriona.
Pasadas las 23, el grupo de trabajadores de la educación y la salud despejó la entrada al peaje y emprendió el regreso a sus casas. Se espera que en las primeras horas de hoy se vuelvan a convocar en la plaza 9 de Julio para evaluar las acciones a tomar en el marco de la protesta. En tanto, sigue el paro de actividades en las aulas que va sumando mayores voluntades ante las últimas situaciones que se vivieron.
El pliego de las y los docentes tiene entre sus principales demandas el pedido de que el salario mínimo sea igual al costo de la canasta familiar (que oscila los $250 mil), y que haya actualizaciones automáticas de acuerdo a la inflación. También se pide que la jubilación sea del 82% móvil, y rechazan la quinta hora que se sumó a las escuelas primarias con jornada simple y la extensión del calendario escolar, ya que “implican la sobreexplotación del docente por salarios devaluados”.
A ello se agregó el reclamo de una real estabilidad laboral, que se garantice la titularización anual para todos los niveles y haya nombramientos en todos los cargos vacantes en cuyos procesos vienen denunciando irregularidades. El pliego de exigencias fue entregado al gobierno el viernes 5, pero hasta ayer no tuvieron respuesta.
Por otro lado, las y los trabajadores de la salud también se autoconvocaron y vienen reclamando desde fines del año pasado, si bien empezaron con acciones más frecuentes desde la semana pasada. Su reclamo radica en una recomposición salarial del básico, donde piden que se modifique el porcentaje que se les paga de antigüedad por año, y el 82% móvil.
También, solicitan el pago retroactivo de los últimos 10 años al ANSeS de los agentes que están próximos a jubilarse y el pase a designación temporaria de quienes fueron contratados en el contexto de la pandemia por covid-19.
Fuente: Pagina 12