El jefe de Estado dio curso al pedido realizado por el juez Martín Bava de Dolores antes de partir hacia la cumbre del G20.
La indagatoria del exmandatario se vio pospuesta luego de que su abogado pidiera la suspensión hasta tanto se levante e deber de su cliente de guardar secreto sobre asuntos de inteligencia.
El presidente, Alberto Fernández, firmó el decreto con el que relevó a Mauricio Macri del secreto de Estado para poder declarar en la causa por espionaje a familiares del ARA San Juan.
Lo hizo horas antes de iniciar su viaje hacia Roma, donde participará de la Cumbre de Jefes de Estado del G20.
El documento, rubricado anoche, releva “al ingeniero Mauricio Macri de la obligación de guardar secreto y confidencialidad en los términos de la Ley Nº 25.520” y en el marco de la causa mencionada, en la cual “resulta imputado, y que tramita en el Juzgado Federal de Primera Instancia de la Ciudad de Dolores, Provincia de Buenos Aires”.
Allí, señalan que se da curso al relevamiento del secreto debido a que se investiga “la posible comisión de delitos vinculados a actividades de inteligencia prohibidas por la ley” y no a actividades o información “que resulte necesario clasificar en interés de la seguridad interior, la defensa nacional o las relaciones exteriores de la Nación”.