Sin derechos, sin paritarias y a tiro del despido

Adorni y Caputo prometieron en el Coloquio de IDEA que enviarán un proyecto de ley post elecciones para quitar derechos laborales. Mientras, sigue creciendo el desempleo.

Para los trabajadores, menos derechos. El Gobierno se encamina a implementar una reforma laboral para eliminar los convenios colectivos de trabajo y facilitar los despidos si gana las elecciones del 26 de octubre. Ésa fue la promesa que le hicieron este jueves el presidente Javier Milei –a través de su vocero, Manuel Adorni– y el ministro de Economía, Luis «Toto» Caputo, a los empresarios reunidos en Mar del Plata para el Coloquio de IDEA. El paquete incluirá también el reemplazo de las mesas paritarias por «negociaciones libres» entre cámaras empresarias y sindicatos, según confirmaron ambos ante un auditorio repleto de directores ejecutivos y miembros del círculo rojo. La letra chica estará contenida en un proyecto de ley que podría ingresar al Congreso luego del recambio legislativo del 10 de diciembre, fecha a partir de la cual la Rosada espera un parlamento «más receptivo a las reformas», según dijo Adorni, siempre y cuando las urnas no digan lo contrario. 

Si bien no fue la primera vez que el Presidente o sus ministros anunciaron en las últimas semanas que la reforma laboral estaba en carpeta, esta vez le dieron el marco de una suerte de relanzamiento del Gobierno post elecciones, como parte de una segunda etapa de la gestión libertaria que también incluye una reforma tributaria. «El primer paso fue estabilizar el descalabro heredado: fiscal, monetario y cambiario; y el segundo paso, reformas para mejorar la competitividad de la economía argentina», dijo Adorni. «Necesitamos reformar el mundo del trabajo, para que el dinamismo económico pueda estar acompañado del dinamismo laboral», agregó. 

La apuesta es a que los cambios en el mundo laboral y el recorte de derechos incluidos en el futuro proyecto de ley abran la discusión del Congreso que se viene, como una forma de retomar la iniciativa perdida en medio de los escándalos de corrupción y la derrota en Provincia de septiembre. Pero la futura norma busca también ser una prenda de negociación para recomponer el marco de alianzas políticas –como la que la Rosada construyó en la Ley Bases– que le reclama el Tesoro de los Estados Unidos como condición del salvataje. 

En esa línea ya se inscribió Mauricio Macri. El líder del PRO sostuvo este jueves en un extenso posteo en tuiter que su voluntad en esa nueva etapa post elecciones será «plantear metas concretas e inmediatas que permitan orientar los acuerdos». Un ejemplo de esas metas sería la reforma laboral regresiva en ciernes. Los empresarios y el círculo rojo, con su habitual mantra de «reglas claras para inventir», juegan en sintonía: “Tenemos que saber en qué cancha estamos jugando”, pidió el presidente del Coloquio de IDEA, Mariano Bosch, al inaugurar el encuentro. Por supuesto que todas esas posiciones están atadas al resultado de la elección, lo mismo que el apoyo norteamericano, tal como lo dejó en claro desde Washington el propio Donald Trump.

Comentarios