Cuestionan las nuevas detenciones en el caso Jimena Salas: “Son perejiles”. El abogado del vendedor Sergio Vargas, Luciano Romano, habló con Profesional FM sobre los nuevos detenidos en el crimen de la vecina de Vaqueros. Advirtió que la Justicia salteña tiene “un capricho por resolver un crimen sin solución”.
Cuestionan las nuevas detenciones en el caso Jimena Salas: “Son perejiles”
El 27 de enero de 2017 asesinaron de 57 puñaladas a Jimena Salas en su casa de Vaqueros. En mayo del año pasado los jueces del Tribunal determinaron absolver por la aplicación del beneficio de la duda al albañil y vendedor ambulante Sergio Vargas y al empresario y ex concubino de Jimena Salas, Nicolás Cajal Gaufín.
Las réplicas y contraréplicas -de uno de los juicios que quedará en la historia de Salta- realizada por fiscales y por la defensa de ambos imputados, el año pasado reflejaron que desde el inicio de la investigación hubo intereses políticos que apresuraron resultados poco concretos; pues a cinco años no se pudo determinar quién mató a Jimena Salas.
No obstante, el martes se realizaron allanamientos en barrio Parque General Belgrano, donde fueron detenidas al menos dos personas, que estarían involucradas en el crimen.
Consultado al respecto, el abogado del vendedor Sergio Vargas, Luciano Romano, dijo estar sorprendido por las nuevas detenciones, debido a que tras intervenir durante un año y medio en la causa no vislumbró ningún indicio o pruebas que lleven a una hipótesis para resolver el caso.
En diálogo con Profesional FM, el letrado aseguró no recordar ningún elemento o línea de investigación, dentro del proceso que se llevó adelante en 2021, que diera pie a una vinculación con nuevas personas.
Según Romano, la causa inició con muchos errores y pérdidas de pruebas, al tiempo que cuestionó que a pesar de ese contexto, la Justicia salteña “continúe con el afán de buscar a un culpable en un crimen que no va a tener solución”.
Asimismo, el abogado apuntó contra la Justicia local asegurando que, al momento de asumir Pedro García Castiella, como Procurador General de la Provincia, se trató el caso con objetividad. Sin embargo, tras la absolución de Cajal y Vargas y la decisión de continuar investigando, demostró que se trata de un “capricho de la Justicia”.
Finalmente, Romano reiteró que tras la desaparición de muchas pruebas la investigación no tendrá una solución real, por lo que consideró que los nuevos detenidos son perejiles.
Fuente: Profesional