Del “Salta es Salta, carajo” al “diálogo y consensos” en Casa Rosada.
Tras las elecciones legislativas del 26 de octubre, el gobernador de Salta participó de la reunión convocada por Javier Milei con 20 mandatarios provinciales. Apenas una semana antes había reivindicado la “identidad salteña” frente a la polarización nacional. Ahora, celebró “una importante reunión de trabajo” con el presidente libertario, quien habló de “consenso absoluto” para avanzar con la reforma laboral.
Por Maira Lopez para Salta 12
Tras las elecciones legislativas del 26 de octubre, en las que su frente Primero los Salteños logró retener bancas en el Congreso, el gobernador Gustavo Sáenz participó en Buenos Aires de la reunión convocada por Javier Milei con veinte mandatarios provinciales. El encuentro buscó apoyo político para el Presupuesto 2026 y las reformas que impulsa el Gobierno nacional, entre ellas la reforma laboral.
A contramano del tono confrontativo que había mantenido durante la campaña, Sáenz habló de “diálogo y consensos” junto al Presidente, quien celebró “un consenso absoluto” en torno a su agenda económica.
El domingo por la noche Sáenz se mostraba exultante en el búnker de Primero los Salteños, frente a una militancia que lo ovacionaba al grito de “Salta es Salta, carajo”. Acababa de conseguir un resultado clave: su frente provincial conquistó la presencia en el Congreso con Flavia Royón, electa senadora, y Bernardo Biella, diputado electo. Desde el escenario, el gobernador reivindicó la autonomía política del norte frente a la grieta nacional. “La polarización entre Cristina y Milei no tiene nada que ver con Salta. Salta es Salta, carajo”, insistió.
Pero este jueves, el tono cambió. A través de sus redes sociales, comentó lo vivido en Casa Rosada. Afirmó que compartieron, «junto al presidente Javier Milei, su gabinete y gobernadores, una importante reunión de trabajo”. Esto fue acompañado de una foto en el Salón Blanco. En el mismo texto, el mandatario provincial aseguró que “más allá de las banderías políticas y las diferencias, el diálogo y la búsqueda de consensos son el camino para construir una Argentina verdaderamente federal”.
Del distanciamiento al acercamiento
Hasta hace unas semanas, Sáenz se mostraba crítico del Gobierno nacional por el incumplimiento de los acuerdos firmados en 2024, especialmente los relacionados con obras públicas, paralizadas. El gobernador había evitado participar de la “Mesa Federal” convocada por Milei tras las elecciones bonaerenses y prefería marcar distancia discursiva del Ejecutivo libertario.
Sin embargo, el triunfo libertario en las legislativas intermedias del 26 de octubre, que consolidó a La Libertad Avanza como primera minoría en Diputados, modificó el tablero político. La reunión convocada en la Casa Rosada buscó, según el propio Presidente, “discutir y pedir apoyo” al Presupuesto 2026 y a las reformas que el Gobierno intentará impulsar en el Congreso.
El encuentro, calificado como “extremadamente positivo” por Milei, reunió a veinte gobernadores. El Presidente afirmó que se logró «estar de acuerdo con matices sobre lo que necesita la Argentina en esta etapa”, e interpretó la presencia de los gobernadores como “una señal de respeto al mandato de cambio expresado por la mayoría de los argentinos”.
Uno de los temas más sensibles fue la reforma laboral, que ya alcanzó discurso político y social. Milei aseguró que se dió hubo un «consenso absoluto”, y añadió: “Argentina tiene un régimen laboral absolutamente anacrónico. Cuando la mitad de los trabajadores está en el mercado informal, significa que el sistema no funciona. Los propios sindicalistas lo admiten”.
El Presidente también dejó un mensaje para la oposición más dura: “El diálogo es posible siempre que se eviten las recetas que provocaron el declive del país. No podemos juntarnos con gente que dos más dos no les da cuatro”.
En tanto, el vocero presidencial Manuel Adorni explicó que el encuentro respondió a la nueva postura marcada por Milei de ampliar la base de sustentación política del oficialismo. A través del acuerdo con gobernadores busca impulsar las reformas que la Casa Rosada considera prioritarias con vista a los próximos dos años. “Es voluntad del Presidente trabajar con todos los gobernadores, independientemente de las diferencias partidarias para retornar al sendero de crecimiento del país”, dijo el vocero.
“Este gobierno va a trabajar con todos los gobernadores y con el Congreso de la Nación para traducir en leyes las consignas que fueron firmadas en el Pacto de Mayo en julio del 2024”, finalizó Adorni. En la reunión se trataron aspectos referidos a las reformas laboral, tributaria y del Código Penal. Otro eje fue el Presupuesto 2026.
Entre la defensa de Salta y la obediencia fiscal
Por su parte, Sáenz se mostró conciliador. “Defender a Salta es defender el desarrollo del norte y el futuro de nuestra gente”, escribió luego del encuentro. El gobernador insistió en el federalismo y en la “igualdad de oportunidades para todos”, sin mencionar las tensiones acumuladas con la Nación por la falta de transferencias de fondos que corresponden a la provincia y la paralización de obras.
El gesto fue leído por algunos analistas como una muestra de pragmatismo. Tras un resultado electoral que fortaleció a Milei y dejó a la oposición fragmentada, Sáenz optó por alinearse al tono de “diálogo” propuesto por el Ejecutivo nacional, escenario que lo muestra una continuidad discursiva desde que asumió Milei.
La reunión en el Salón Eva Perón contó con la presencia del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem; y los ministros de Economía, Luis “Toto” Caputo; del Interior, Lisandro Catalán; de Seguridad, Patricia Bullrich; de Defensa, Luis Petri; de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger; de Justicia, Mariano Cúneo Libarona; de Capital Humano, Sandra Pettovello; de Salud, Mario Lugones; de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Pablo Quirno; la secretaria Legal y Técnica María Igarzábal; el presidente del Banco Central, Santiago Bausili y el asesor del Presidente, Santiago Caputo.
También participaron los gobernadores Carlos Sadir (Jujuy), Jorge Macri (Ciudad de Buenos Aires), Maxmiliano Pullaro (Santa Fe), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio “Nacho” Torres (Chubut), Raúl Jalil (Catamarca) Osvaldo Jaldo (Tucumán), Hugo Passalacqua (Misiones), y Claudio Poggi (San Luis), Alberto Weretilneck (Río Negro), Marcelo Orrego (San Juan) y Martín Llaryora (Córdoba), Gustavo Valdés (Corrientes), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Sergio Ziliotto (La Pampa) y Claudio Vidal (Santa Cruz), Hebe Casado (vice en Mendoza) Zulema Reina (vice en Neuquén) y Silvana Schneider (vicegobernadora del Chaco).
